"Estamos peor pero estamos mejor, porque antes estábamos bien pero era mentira, no como ahora que estamos mal pero es verdad” (Frase tomada la película "Si yo fuera diputado” del mimo de México, Mario Fortino Alfonso Moreno Reyes "Cantinflas”).
Hace algunos años ya, el entonces Instituto Nacional Federal (IFE), hoy Instituto Nacional Electoral (INE), lanzó una campaña para invitar a todos los mexicanos mayores de edad a tramitar su credencial de elector y de esta manera estar en posibilidades de participar en la toma de decisiones importantes de nuestro país. En dicha campaña repetida en todos los medios de comunicación (radio, televisión y prensa escrita), se reproducían imágenes y comentarios de ciudadanos arrepentidos que se quejaban y lamentaban por no haber tramitado a tiempo su credencial para votar y por lo tanto de malos resultados de las acciones del gobierno en turno para acto seguido, los promotores del IFE decirle en diferentes tonos y expresiones a los ciudadanos que no tramitaron a tiempo su credencial para votar, "Te lo dije”.
Lo anterior viene a mis recuerdos porque desde el proceso electoral del año dos mil, cuando todo parecía que por primera vez en la historia el otrora "todo poderoso PRI” perdería la Presidencia de la Republica ante un candidato "dicharachero&rdquo, "con lenguaje florido&rdquo, de botas y sombrero que prometía "sacar al PRI de Los Pinos&rdquo, los antorchistas de todo el país, guiados por el análisis siempre certero y visionario de nuestro secretario general, el ingeniero Aquiles Córdova Morán, invitamos a todos los mexicanos antorchistas y no antorchistas a no confundirse y no dejarse llevar por los "cantos de sirena” del entonces candidato del PAN, Vicente Fox Quezada, e incluso, se editó un documento escrito en el que se puntualizaba uno a uno los motivos por los que el movimiento Antorchista Nacional, llamaba a todos los mexicanos a no votar por Fox, dicho documento llevaba el título de "Porqué no votar por Fox”.
Esta historia se ha repetido sexenio tras sexenio; en 2006, 2012 y una vez más en 2018. Los mexicanos hartos ya de más de 80 años de malos gobiernos priistas y panista y con desastrosos resultados, creyeron una vez más que solo bastaba con no votar por los candidatos corruptos del "PRIAN” para que ahora sí las cosas cambiaran en beneficios de los pobres de siempre y una vez más, votaron por un candidato que prometió acabar con la corrupción, que prometió crecer al doble de los "gobiernos neoliberales” hasta llegar a un crecimiento del 6% y que prometió llevar a México a niveles de vida de países como Suecia, Dinamarca o Canadá. Votaron por un candidato que prometió ser "La esperanza de México” y que vendió fácilmente su eslogan de campaña: "por el bien de México, primero los pobres”. Una vez más el pueblo sabio y bueno, sobre todo el menos informado y peor educado, se equivocó.
No hay duda de que la derrota del "PRIAN” –como los llama López Obrador y sus seguidores– es el resultado del cobro de la factura de más de 80 años de su mal gobierno, el actual inquilino de Palacio Nacional y quien esta atrás de él leyeron a tiempo el descontento social en contra de todos los vicios de los anteriores gobiernos y principalmente de la corrupción que por cierto fue el tema central de su campaña rumbo a la Presidencia.
A dos años de tomar el poder el presidente Andrés Manuel López Obrador y su autollamada "Cuarta Transformación” la lucha contra la corrupción, una de las principales banderas enarboladas por López Obrador sigue presente en el actual gobierno, la lista de funcionarios y familiares cercanos del presidente es larga: Manuel Bartlett de la CFE, Zoé Robledo de Bienestar, Irma Eréndira Sandoval de la Función Pública y su esposo Ackerman, Ana Gabriela Guevara de la Conade, Pío López Obrador, y más recientemente su prima Felipa Obrador, son solo un ejemplo.
En cuanto a la promesa de que los mexicanos viviríamos como se en los países nórdicos, no está de sobra decir que nuestro país se encuentra entre los países del mundo que no presenta crecimiento en su Producto Interno (PIB), según un informe del Banco Mundial publicado el 30 de enero de 2018, "la riqueza mundial creció significativamente durante las últimas décadas, pero la riqueza per cápita se redujo o se estancó en más de 20 países&rdquo, en México el PIB no solo no creció, se redujo en 0.3% en 2019. Además, según el Inegi, en los dos años de la presente administración la pobreza ha aumentado en más de 10 millones de personas, debido en parte a la falta de generación de empleos y al nulo crecimiento económico y como resultado del impacto económico negativo provocado por la pandemia del covid-19. El Sistema de Salud está colapsado, con la desaparición del Seguro Popular y el IMSS, miles de mexicanos se quedaron sin atención médica. El Sistema Educativo es otro rubro pendiente de atender, cientos de miles de nuestros niños y jóvenes no tienen acceso a la red de internet ni cuentan con dispositivos inteligentes para recibir sus clases "en línea”; y la seguridad? ya mejor ni hablamos.
Un último dato para recordar aquella famosa frase que da título a esta colaboración. Como resultado de la entrada a nuestro país de varios frentes fríos y la llegada de dos huracanes en el sureste mexicano, gran parte del territorio tabasqueño si no es que la totalidad, sufrió severas inundaciones. A más de dos meses de que Tabasco se encuentra con "el agua hasta el cuello” el gobierno federal sigue mostrando una total indiferencia hacia los más pobres, el propio presidente inundó a las comunidades indígenas sin tomar medidas preventivas para evitar una crisis de la dimensión que enfrenta la entidad en este momento, todo por evitar inundar uno de sus proyectos insignia, la refinería de Dos Bocas.
46 años de hacer extensiva la invitación a todos los mexicanos, para que de manera unida, educada y consciente luchemos por una patria más justa, más democrática y soberana para todos, nos da la certeza de decir: "Te lo dije”.
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